11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes

El Santuario de Lourdes le invita a celebrar la festividad de Nuestra Señora de Lourdes en la Gruta de Massabielle. Se espera que miles de peregrinos celebren y recen juntos a Nuestra Señora. Venga a vivir esta hermosa festividad en el lugar donde las personas enfermas siempre están en la primera línea.

Programa:

8:00 h: Laudes en la basílica del Rosario con los capellanes del Santuario
10:00 h: Misa internacional en la basílica de San Pío X, presidida por S. E. el cardenal François Bustillo
12:00 h: Ángelus en la Gruta y evocación de la Aparición
12:30 h: Rosario en ucraniano
13:00 h: Rosario en portugués
13:30 h: Rosario en árabe
14:00 h: Rosario en polaco
14:30 h: Rosario en alemán
15:00 h: Rosario en inglés
15:30 h: Rosario en francés
16:15 h: Rosario en español
17:00 h: Adoración y bendición del Santo Sacramento en la basílica de San Pío X
18:00 h: Rosario en italiano
20:30 h: Procesión mariana de las antorchas

El 11 de febrero de 1858, una niña de 14 años salió de un calabozo húmedo, oscuro y sucio para ir a buscar leña y aportar así un poco de luz y calor a la triste vida del calabozo. Decide ir a la gruta de Massabielle, porque es un lugar comunal y nadie puede acusarla de ladrona. Un lugar donde ni siquiera el sol puede entrar debido a su orientación.


Es allí donde la luz del cielo viene a iluminar la vida de la pobre Bernardita. Es allí donde hoy se reúne una gran multitud para encontrar la luz del cielo. Una multitud que viene a buscar el agua viva, el agua del bautismo… ¡Vengan y vean!


En este año de preparación al Jubileo 2025, Lourdes se une a la voz del papa Francisco y dedica este año a la oración.
Recemos juntos a Nuestra Señora, ya sea desde Lourdes mismo o con el corazón.

Evocación de la primera aparición:

«Acompañada por su hermana y una amiga, Bernardita fue a Massabielle, a orillas del río Gave, para recoger huesos y madera. Al quitarse las medias para cruzar el arroyo e ir a la gruta, oye un ruido como una ráfaga de viento, y mira hacia la gruta: “Vi a una señora vestida de blanco: llevaba un vestido blanco, un velo blanco, un cinturón azul y una rosa amarilla en cada pie”. Bernardita hace la señal de la cruz y reza el rosario con la señora. Cuando termina la oración, la señora desaparece de repente».