Como su propio nombre indica, el Día de Todos los Santos es la festividad de todos los santos. De este modo, cada 1 de noviembre, la Iglesia honra a los innumerables hombres y mujeres que han sido testigos vivos y luminosos de Cristo.
Por esta razón, esta festividad también es una ocasión para recordar que todas las personas están llamadas a la santidad, de diferentes maneras, pero todas accesibles. La santidad no es un camino reservado a una élite: concierne a todos los que eligen seguir los pasos de Cristo (Leer la exhortación del Papa Francisco «Gaudete et Exsultate»
Celebrar el Día de Todos los Santos
11.15 : Misa en la capilla de San José
16.15 : Rosario en la Gruta
17.00 : Adoración Eucarística e, ma basílica de San Pío X
21.00 : Procesión mariana de las antorchas
22.30 : Misa en la Gruta
Conmemorar a los difuntos
El 2 de noviembre está dedicado a la conmemoración de los difuntos. En este día, en el Santuario de Lourdes, en este lugar donde la luz se ofreció a una pobre niña, en el hueco de un agujero negro en la roca, queremos unirnos en amistad y oración.
El P. Michel Daubanes, rector del Santuario, presidirá la misa de las 11:15 h en la basílica del Rosario por los difuntos, confiando en la misericordia de Dios. Será una ocasión para rezar por todos nuestros difuntos y, en especial, por todos los que nos han dejado este año.
Horarios para el 2 de noviembre
11.15 : Misa en la capilla de San José.
16.15 : Rosario en la Gruta
17.00 : Adoración Eucarística en la basílica de San Pío X
21.00 : Procesión mariana de las antorchas
22.30 : Misa en la Gruta
Con motivo de la festividad de Todos los Santos, le proponemos encender una vela o celebrar una misa en memoria de sus difuntos.
Bernardita, una santa: su beatificación y canonización.
Desde 1858, para quienes creían en la autenticidad de las Apariciones, Bernardita es una santa, un ángel, un ser celestial. Pero a quienes le decían que podía estar tranquila sobre su salvación, ya que la Señora le había asegurado que sería feliz en el otro mundo, Bernardita les respondía que iría al cielo, «sí, si me lo gano».
Aunque el proceso para su beatificación y su canonización comenzó en 1907, el cuerpo fue encontrado tres veces, en 1909, 1919 y 1925. En cada ocasión, el cuerpo fue descubierto intacto.
Mientras que la investigación continuaba, interrumpida por la guerra de 1914-1918, las visitas a Nevers, a la tumba de Sor Marie-Bernard, se multiplicaban, así como las peticiones de oración y las gracias obtenidas. Así, la reputación de su santidad quedó confirmada.
Dos curaciones fueron consideradas milagrosas antes de la beatificación, la cual se celebró el domingo 14 de junio de 1925 en San Pedro de Roma.
La canonización tuvo lugar ocho años más tarde, después de que se registraran otras dos curaciones milagrosas. Uno de los dos beneficiarios era un obispo que asistió a la ceremonia sin titubear.
Su cuerpo fue depositado en una urna de la Capilla, donde todavía permanece.
El Papa Pío XI eligió el día 8 de diciembre de 1933 como fecha para la canonización de Bernardita, año de jubileo de la Redención. De esta forma, la Redención, la Inmaculada Concepción y Bernardita, la confidente de la Inmaculada, estaban unidas las unas a las otras.
Este año, celebraremos el 90 aniversario de la canonización de Bernardita.
Puede venir a celebrar el aniversario de la canonización de Bernardita con el Santuario Nuestra Señora de Lourdes.